domingo, 20 de septiembre de 2009

Miradas en triángulo. Polisemia.


Hoy, por suerte, es siempre todavía, pero no lo parece. Esquivamos la mirada, nos esquivamos en la cercanía, huimos. No hay futuro porque no hay pasado, y sin embargo es ahora, dentro, si sabemos verlo, si nos miramos. Pero, ¿quién mira?

4 comentarios:

Isabel de León dijo...

M ha gustado muxo...quien mira al exterior?.

Saludos de la chica q observa...hacia ambos lados,jeje.

Ruth Carlino dijo...

Esquivamos la mirada, sí, así es, lo que de algún modo nos molesta pues no queremos verlo, y así sucede que de tanto esquivar lleva un día en que se cruzan esas miradas pero no se reconocen, se miran pero no se ven.

En pocas palabras consigues hacer reflexiones tan profundas que otros necesitaríamos escribir hojas enteras para reflejar lo mismo. Tienes un don.

(La mujer del banco me ha recordado a mi amiga Nadeza, siempre viste casi así.



Besos diego.

Anónimo dijo...

Me alegro de que guste, Isabel, la chica que observa, y que lo hace hacia ambos lados; eso está bien.
Diego

Anónimo dijo...

Mirar, siempre mirar. En la mirada está la vida, Ruth, la verdad.
Me halagas en demasía. Te lo agradezco.
Siempre es un placer tenerte por aquí y leerte.
Un beso.
Diego