Mientras soñaba una
lluvia de reflejos sobre cristales rotos en la seda de un lago quieto donde una
rana croaba enamorada al desdén de un
viento ingenuo y antiguo que nada le decía cuando junto a ella pasaba y aun así
seguía arrobada en el canto que regalaba sin pedir a cambio siquiera una mirada
o un leve desvío de pensamiento o quizás una caricia tan solo que fuese lo
suficientemente delicada como para sentir que para él en algún momento sería,
me sentí ella, sentí lo que ella sentía, me sentí vivo, me sentí más yo que jamás lo había sido y
probablemente sería.
¡El futuro del país!
Hace 10 años
7 comentarios:
La ausencia de comas, hasta bien entrado el texto, hace que sea incluso más hermoso.
Parece un sueño, como si lo hubieras vivido muy intensamente.
Muy muy bello, Diego.
Gracias.
Abrazos.
Ío
Deliciosa lección de vida cuando nos sentimos más "yo" que nunca al ponernos en la piel de otro.
La lluvia de otoño es la que más comprende el alfabeto de la piel.
Un abrazo, Diego.
Hay veces q ponerse dl otro lado ayuda...sea del lado d una rana, del lado d la otra persona o del otro lado, simplemente...
Y seamos más!!!siempre más!!!aunq seamos dl tamaño d una oruga...aspiremos a mariposa!!jajaja
Saluditos de la chica "aspiradora" jajajaja ;)
Soñar es gratis y sentir...sentir es liberador, aunque duela y dure un instante.
Somos pura imaginación sobretodo en otros.
Stoy yo como evocadora jaja
Saluditos de la chica en vuelo.
Gracias Ío, viniendo de ti, es más agradecido, por tu sensibilidad y por tu talento. Me alegro de que lo veas así, que lo hayas sentido intenso.
Gracias, siempre, a ti.
Un abrazo
Un placer Marisa. La lluvia siempre, aunque quizás más en los equinoccios.
Un abrazo y gracias.
Dos en uno, Mi Doña. El tiempo que hace que no ande o andemos mucho por aquí, y ¿sabes?, te echo de menos. Tengo que escribir más a ver si apareces.
Chica en vuelo, mariposa, evocadora... Impresionante siempre.
Un beso, Isabel.
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